Jeremy Strong nos habla de la segunda temporada de ‘Succession’

Jeremy Strong, quien da vida a Kendall, habla sobre lo que le da identidad y éxito a Succession, la serie de HBO.

Por Staff Cine

Apareció muy sigilosamente, pero Succession ha sabido colocarse en el gusto del público y ganarse la infalible recomendación “de boca en boca”. Por eso no sorprende que la serie tenga una segunda temporada (ahora disponible en HBO Go) y todo parece indicar que los dramas serán más intensos. 

“Leí nuevamente Crimen y castigo antes de empezar la temporada, y Jesse (Armstrong, el showrunner) me envió algunos artículos sobre personas que han tenido la misma experiencia que mi personaje. El trauma con el que viven y la sensación de que atravesaron alguna línea irreparable de su propia humanidad”, cuenta Jeremy Strong, el actor que da vida a Kendall. 

Justo es el intérprete quien nos contó sobre la clave del éxito de esta producción y los momentos más complejos que le ha dejado como actor. 

Cine: ¿A qué le atribuyes el éxito de Succession?

Jeremy Strong: A Jesse Armstrong. No es una cosa cuantificable, pero en parte se debe al corazón y el alma de Jesse. Lo notas en cuanto hablas con él. Tiene un centro moral y un gran sentido de decencia, pero también mucho humor. Y como toda persona perspicaz y entusiasta, Jesse es muy profundo. Así que se lo atribuyo a él. 

Además, creo que las audiencias están deseosas de algo que haga un sonido real, no ruido. Y me gustaría pensar que con este programa estamos comprometidos con esa idea y nos esforzamos por crear una voz genuina. Tratar y decir una historia realmente honesta sobre esta gente. Está ambientada en un enrarecido mundo, pero creo que es una historia sobre la individualización y las familias complejas. Las dos grandes motivaciones en la vida son el amor y el poder. Y esta serie es sobre ambas, en la forma en que se cruzan y a veces chocan entre sí. También trata de cuando el poder se convierte en el impulso principal, eso puede crear algo tóxico, y en el núcleo de una familia como ésta, la cual tiene mucho poder, esa toxicidad puede llegar a ser algo muy peligroso, como algunas de las familias más poderosas que existen actualmente en el mundo…

 

¿Te fue difícil controlarte en las escenas de mayor improvisación?

Kendall es muy serio; no es que no tenga sentido del humor, pero sí peca de serio. En uno de los libros leí un detalle sobre cómo James Murdoch ata ajustadamente sus agujetas. Es sólo uno de esos pequeños aspectos que te dan una perspectiva completa.

También tiene algo de agresivo, un impulso por el control. Ya sabes. Es un adicto y necesita tener el control de las cosas, tener todo en orden, porque podría perderse en el caos muy, muy rápidamente. Así que su adicción, en cierto sentido, se ha transformado en una adicción de poder y control.

 

¿Descubriremos nuevos rasgos de Kendall en la segunda temporada?

Eso creo. Veremos algunas historias de amor que nunca antes atestiguamos. Es algo que me hizo feliz cuando empezó a suceder porque, al final de la primera temporada, Kendall perdió todo lo que era esencia para él; su motor, su sentido de integridad… Así que para recuperar algo positivo, el amor podría ser lo único que traería a una persona de vuelta. 

 

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Regresemos un poco a la temporada uno. En el penúltimo capítulo hay un accidente. ¿Cómo fue filmar ese incidente y luego la larga y empapada caminata rumbo a la boda?

Es todo un desafío actoral cuando has filmado, durante una semana o dos, una secuencia de 10 ó 20 minutos en la que necesitas, por un lado, mantener ese solo de violín y el mismo tono bajo todo el tiempo. Entonces debes conservar ese tono y en un momento de crisis. Y luego, las escenas subsecuentes, en donde tengo esa secuencia con mi padre, estuve a punto de experimentar esa crisis. Así que de alguna forma muchas de esas presiones y traumas fueron reales. Ese colapso, desmoronamiento y agrietamientos hacia el final, fueron muy reales para mí. 

 

¿Qué tan difícil ha sido interpretar todos los matices de este personaje?

Por un lado, es gratificante. Como actor siempre estás buscando material que te lleve a través de toda la gama de experiencias y emociones posibles. Así que, sí, ha sido un desafío increíble. Pero ha sido una progresión: la primera vez que vemos a Kendall cantando en su carro, tratando de elevarse, él está entre irracional y auténtico. Después lo hacen girar y girar, y su identidad se forja en esa adversidad. Ha sido como un regalo del programa para mí y al mismo tiempo un reto.

Encuentra la primera y segunda temporada de Succession con Jeremy Strong en HBO Go.