Michael Moore escribe sobre la importancia de ‘Joker’

Este fin de semana, Joker de Todd Phillips se apoderó de la taquilla mundial, destrozando el récord de recaudación de octubre que Venom impuso en 2018. Mientras esto sucedía, y con el antecedente de The Dark Knight Rises en 2012, se encendieron las alertas sobre el potencial de tiroteos durante proyecciones de la película, propiciando la presencia de policías encubiertos. Esto llamó la atención de Michael Moore, documentalista, escritor y activista político que en su obra ha desmenuzado y criticado a la sociedad estadounidense desde diversos ámbitos.

A propósito de lo anterior, Moore escribió una larga publicación en Facebook en el que elogia la película y explica por qué la considera necesaria, al tiempo que critica la hipocresía de considerarla una película peligrosa.

A continuación puedes encontrar la publicación completa de Michael Moore, director de documentales como Fahrenheit 9/11. Retomaremos y traduciremos los fragmentos más relevantes de su argumento:

https://www.facebook.com/mmflint/posts/10156278766436857

 

“La noche del miércoles asistí al Festival de Cine de Nueva York y presencié una obra maestra cinematográfica, el filme que el año pasado obtuvo el premio principal como Mejor Película del Festival Internacional de Cine de Venecia. Se titula Joker, y todo lo que nosotros los estadounidenses hemos escuchado es que es una película que debemos temer y alejarnos de ella. Se nos ha dicho que es violenta, enferma y moralmente corrupta, una incitación y celebración del asesinato. Se nos ha dicho que la policía estará en todas las funciones del fin de semana por si hay “problemas”. Nuestro país está en profunda desesperación, la constitución está hecha pedazos, y un truhán maniaco de Queens tiene acceso a los códigos nucleares, pero por alguna razón, debemos temerle a una película.

 

Yo sugeriría lo contrario: el peligro mayor para la sociedad es NO ver esta película. Porque la historia que nos cuenta y las preguntas que hace son tan profundas y necesarias, que si no volteas a ver esta genial obra de arte, te perderás el regalo que es este espejo que nos ofrece. Sí, es un perturbado payaso quien está en ese espejo, pero no está solo, nosotros estamos junto a él.

 

Joker no es una película de superhéroes o supervillanos o de cómics. El filme sucede en los 70 u 80 en Ciudad Gotham – y los cineastas no hacen ningún intento por disfrazar lo que es: la ciudad de Nueva York, los cuarteles generales de la maldad: los ricos que nos gobiernan, los bancos y corporaciones a los que servimos, los medios que nos dan la dieta diaria de “noticias” que creen que debemos absorber».

Michael Moore hace referencia a las voces de preocupación porque Joker fuera a incitar violencia con armas de fuego, particularmente por parte de la subcultura que se autodenomina incels.

Lee más: Incels y armas de fuego: ¿por qué la controversia con Joker?

Entonces procede a escribir sobre la naturaleza prácticamente demencial de que Donald Trump sea quien se siente hoy en el Despacho Oval de la Casa Blanca con impunidad, a pesar de acusaciones de corrupción y colusión con Rusia en las pasadas elecciones presidenciales.

“Pero esta película no es sobre Trump. Es sobre los Estados Unidos que nos dieron a Trump – los Estados Unidos que ya no sienten necesidad de ayudar a los marginados y destituidos (…).

 

Sólo que en esta historia se realiza una pregunta desconcertante: ¿qué pasa si un día los desposeídos deciden contraatacar? Y no quiero decir con un portapapeles para registrar a los votantes. A la gente le preocupa que esta película sea demasiado violenta para ellos. ¿De verdad? ¿Considerando todo lo que vivimos en la realidad? Ustedes permiten que las escuelas lleven a cabo simulacros en caso de tiradores con sus hijos, dañándolos emocional y permanentemente al mostrarles las vidas que hemos creado para ellos. Joker deja claro que no queremos llegar al fondo de esto, ni entender cómo es que inocentes se convierten en Joker cuando no pueden soportarlo más, Nadie se pregunta por qué dos niños inteligentes se saltaron su clase de filosofía francesa en la preparatoria Columbine para matar a 12 estudiantes y un profesor.

 

(…). Mientras los medios esperan al siguiente tiroteo, tú, tus vecinos y colegas ya han sido asesinados múltiples veces, baleados a través de sus corazones, esperanzas y sueños. Ya no tienen pensión. Estarán endeudados por 30 años por el crimen de haber querido una educación. En verdad han considerado no tener hijos porque no quieren traerlos a un planeta decadente en el que recibirán al nacer una sentencia de muerte por cambio climático. ¿La violencia en Joker? ¡Déjenla ya! La mayoría de la violencia es perpetrada contra el propio Joker, una persona en busca de ayuda, alguien que trata de sobrevivir al margen de una sociedad avara. Su crimen es no encontrar ayuda. Su crimen es ser el motivo de una broma que le juegan los ricos y famosos. Cuando Joker decida que ya no puede soportarlo, sí, te sentirás terrible. No por la (mínima) sangre en pantalla, sino porque en el fondo, lo estabas apoyando – y si eres honesto cuando eso suceda, agradecerás a esta película por conectarte con un nuevo deseo: no huir a la salida más cercana para salvar tu trasero, sino luchar y enfocar tu atención con el poder no violento que tienes en tus manos todos los días”.

Como documentalista, Michael Moore ha analizado y criticado varios aspectos de la cultura estadounidense del siglo XXI, desde la guerra en Afganistán (Fahrenheit 9/11) a la cultura de violencia por armas de fuego en el país (Bowling for Columbine), y su insostenible sistema de salud pública (Sicko). Recientemente, analizó y predijo acertadamente la victoria de Trump en las elecciones presidenciales de 2016 (puedes leer dicho análisis en este enlace).

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