‘Colette’… la mano que sostiene la pluma escribe la historia
Contenido
Colette
Director: Wash Westmoreland
Actúan: Keira Knightley, Dominic West y Eleanor Tomlinson
Duración: 111 minutos
★ ★ ★ ☆ ☆
Sinopsis
Cuando Gabrielle (Knightley) se casa con Willy (West), ella no imaginaba que se convertiría en la ghostwriter de su frustrado marido. Y eso es sólo el planteamiento de esta historia real.
“Nuestros compañeros perfectos nunca tienen menos de cuatro patas”, dijo Sidonie-Gabrielle Colette en algún momento de su vida. Claro que así refería al mejor amigo del hombre, pero si pones atención a su historia notarás que la traición también retumba en esas palabras.
Colette, la película biográfica que dirige Wash Westmoreland, te permitirá descubrir los momentos más determinantes en la vida de la novelista francesa —instantes muy específicos entre los últimos años del siglo XIX y los primeros del XX—, a la par de que te muestra la transformación de una mujer que transgredió antes de aceptar la sumisión.
Este relato contado de manera cronológica adquiere fuerza tanto por las acciones del personaje en el que se inspira, como por la recreación de la época, y es esta última la mayor virtud del filme. Cada detalle en las habitaciones que se muestran —la mayoría de las escenas son interiores—, refleja el momento y el estatus del matrimonio central; mientras que los vestuarios no se limitan a replicar la moda, además son herramienta para revelar la personalidad de la escritora.
Los esfuerzos de la producción por sumergirte en la atmósfera idónea se rompen, hasta cierto punto, por el idioma, sobre todo para quienes son muy ortodoxos en aquello de la recreación de lugares y momentos. Y es que el inglés predomina en esta cinta estadounidense y británica, e intenta que omitas ese detalle con los acercamientos que hacen a los manuscritos en la lengua nativa de la autora francesa.
Si logras ignorar esa pequeña inconsistencia, seguramente disfrutarás de la cinta por el deslumbramiento de su manufactura, los descubrimientos que haces de la mano de su protagonista y la curiosa presencia de su bulldog francés, pero no pasará de eso. Aunque el guion se concentra en los momentos determinantes para Colette, todo se desarrolla de manera uniforme, por lo que el punto de más tensión apenas si se saborea.
De tal forma podemos considerar esta cinta como un retrato convencional y con una interpretación del mismo calibre. Keira Knightley aparece con una actuación digna pero, posiblemente debido a su extenso catálogo de personajes de época, no consigue sorprenderte en ningún momento; incluso hay instantes en los que su rebeldía luce más como rabietas.
Con esta falta de propuesta, la cinta resulta en una buena intención pero contradictoria respecto a las virtudes del personaje que retrata; además de lucir como un acercamiento superficial al feminismo que promete mostrar.
Veredicto
Por si extrañas una película de época o a Keira Knightley en papeles de época. La historia de Colette es interesante e inspiradora, y aquí se muestra de una forma si bien accesible para todo tipo de público, también resulta en algo convencional. Pese a eso, es una opción disfrutable.
