Disney cancelará múltiples películas de Fox

Tras la histórica y multimillonaria adquisición de 21st Century Fox por parte de The Walt Disney Company, ha sucedido toda una reestructura al interior de la compañía. Esto incluye una evaluación de todos los proyectos del estudio previo a su adquisición. Como consecuencia, varias películas de Fox serán canceladas.

La cabeza de Walt Disney Studios, Alan Horn ha decidido eliminar varias producciones del calendario del estudio. Ningún título particularmente reconocible, pero esa parece ser la lógica: Disney dispondrá de todos los futuros proyectos que no sean franquicias consagradas o potenciales.

Para muestra, el caso de Mouse Guard, basada en el cómic homónimo de David Petersen. De acuerdo a The Hollywood Reporter (THR), la producción de $170 millones de dólares fue considerada demasiado costosa para no ser una franquicia.

 

Otras películas de Fox canceladas han sido retomadas por otros estudios. Tales son los casos News of the World, con Tom Hanks, y On the Come Up, basada en el libro homónimo de Angie Thomas. La adaptación previa de la autora al cine, The Hate U Give, perdió dinero para el estudio a pesar de su modesto presupuesto. También se espera que la comedia dramática Fruit Loops, con Woody Harrelson, termine en manos de otro estudio.

Hay otras producciones que fueron aprobadas por la entonces cabeza de Fox, Emma Watts, que siguen con vida dentro de Disney, aunque bajo intenso escrutinio. Tales son los casos de la precuela de Kingsman, The Great Game, y el remake de West Side Story de Steven Spielberg.

Según las fuentes de THR, esta última tiene a Horn con la ceja levantada, pues se planeaba que personajes jóvenes aparecieran fumando a cuadro. Al parecer eso estará prohibido en la casa de Mickey Mouse.

Entre las películas de Fox, hasta ahora la única que tiene incuestionable luz verde es Avatar 2. Tiene sentido: es la secuela a la película que más billetes verdes ha generado a nivel mundial.

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Sin embargo, el punto no es producir películas con menores presupuestos. El nuevo enfoque será, para bien o mal, realizar películas para públicos mucho más amplios, costosas o no.