“Fue mi monstruo por años”: Salma Hayek habla sobre la pesadilla que es Harvey Weinstein

Harvey Weinstein había sido por años, uno de los hombres más poderosos y reconocidos dentro de la industria del cine. No solo es el productor de todas y cada una de las películas de Tarantino, sino que también es dueño de varias compañías de entretenimiento. Pero luego de las más de 60 denuncias de acoso sexual hechas por varias artistas, entre ellas Cara Delevinge y Angelina Jolie, el productor fue internado en una clínica para tratar la adicción al sexo y su prestigio se ha desmoronado. 

Pero además de que la reputación de Weinstein se fue por el caño, el hecho de que las denuncias se realizaran por redes sociales alentó a que otros actores y actrices decidieran hablar sobre el grabe problema de acoso sexual que se vive en Hollywood. El lado brillante del panorama es que las compañías están cerrando las puertas a todos aquellos que han abusado de alguien dentro de la industria—como en el caso de Spacey, que fue despedido de House Of Cards y eliminado de la película en la que había trabajado con Ridley Scott, All The Money in the World. 

Hace unos días, una nueva víctima de acoso decidió alzar la voz: Salma Hayek habló sobre el infierno que le hizo vivir Harvey durante las grabaciones de Frida, film que ella produjo, por el que no recibió un centavo y en el que fue obligada a grabar un desnudo de cuerpo completo junto a Ashley Judd para complacer a Weinstein. 

El testimonio fue publicado en forma de carta por el New York Times y en ella, Salma habla de su experiencia siendo coordial con un hombre que la hizo sentir inferior durante años y la veía simplemente como un objeto:  

“Por muchos años, fui cordial con un hombre que me dañó profundamente”. Y agrega: “Ante sus ojos, no era una artista. Ni si quiera una persona. Era una cosa: no un individuo, sino un cuerpo”. 

“Creí que para este momento a nadie le importaría mi dolor—tal vez eso es un efecto de las muchas veces que me dijeron, especialmente por Harvey, que no era nadie”, comenta Salma al inicio de la carta. En donde también explica que Frida Kahlo es una de sus mayores influencias y, por esa misma razón, era tan importante para ella contar su historia.  

Sobre el tiempo que tuvo que convivir con Harvey, Salma lo describe como un bucle interminable de negativas: 

“No a abrirle la puerta a diferentes horas en la noche, hotel tras hotel, locación tras locación, en donde se aprecia de manera inesperada, incluyendo una locación donde estaba haciendo una película en la que él no estaba involucrado. No a tomar un baño con él. No a que me viera mientras me bañaba. No a que me diera un masaje. No a darle sexo oral. No a estar desnuda junto a otra mujer”. 

Como lo concluye Salma en su carta, el mayor problema que enfrenta Hollywood en este momento es la falta de reconocimiento a las artistas y el público femenino, algo que debe cambiar para que la percepción hacia las mujeres en Hollywood de un giro de 360 grados. 

La carta completa puedes leerla dando click aquí.