Ni tú ni yo, la lucha por la familia

Asistimos a la conferencia de prense de la cinta mexicana Ni tú ni yo, y de paso, vimos el renacer del cine mexicano de luchadores.

Por Gerardo Villarreal

En los últimos años, los modelos familiares han evolucionado, por lo que Mauricio Argüelles y César Rodríguez, muestran parte de la diversidad familiar que existe en México a través de su cinta Ni tú ni yo (2018).

De igual forma, los productores, escritores y actores del largometraje, recordaron que en los momentos más difíciles la familia siempre nos apoyará e impulsará a salir adelante.

Por otro lado, Rodríguez habló sobre las dificultades que tuvo al escribir el guión, y como a medida que otras personas se incorporaban al equipo, se aportaban más ideas que beneficiaban a la historia.

“Había cosas que funcionaban y otras que no, chistes que se iban y otros que regresaban, fue un proceso muy largo, ya con el director y el elenco reunido surgieron otras cosas, al final se transformó en un trabajo de todos”, compartió.

Además, Argüelles platicó sobre los seis meses de entrenamiento que tuvo para interpretar a Guadalupe Martínez, “El Halcón Negro”, uno de los protagonistas de la película, y la colaboración que tuvo con la Triple AAA.

“La última película de lucha libre era Nacho Libre (2006), una película americana, antes de eso no hay otra, para nosotros era muy importante resucitar ese tipo de películas con simbolismos mexicanos.

«La apertura fue desde que les presentamos el proyecto, ellos querían estar ahí, todos los luchadores que aparecen en pantalla son de la Triple AAA, Psycho Clown es la máscara más vendida en México y fue una gran oportunidad contar con El Maestro Apache, que es una leyenda”, señaló.

El filme, que tiene incentivos fiscales de EFICINE y FIDECINE, los cuales buscan brindar apoyos financieros a productores, distribuidores, comercializadores y exhibidores de películas nacionales, se estrenará en más de mil pantallas el 12 de octubre.

Sinopsis de NI tú ni yo

Guadalupe Martínez “El Halcón Negro”, era el luchador más famoso del país, gracias al apoyo de su hermano Gabino “El Conejo”. Pero llevaban años separados por las adicciones de El Conejo. El Conejo vuelve para reconciliarse con su familia, pero solo logra que El Halcón Negro pierda la pelea que lo podría haber devuelto a la cima de su carrera. Cuando todo parece perdido Miranda, la dueña de la lucha independiente, les ofrece la oportunidad de su vida, con la condición de que trabajen nuevamente juntos. Al comenzar a trabajar juntos se darán cuenta de que las cosas no son como les habían prometido y que tendrán que trabajar en equipo para recuperar su nombre y prestigio.