‘Poetas del cielo’: la pantalla en el firmamento

Poetas del cielo es un nuevo documental de Emilio Maillé (Rosario Tijeras) que brinda un vistazo único al mundo de la pirotecnia. Te contamos más en nuestra reseña.

Director: Emilio Maillé

Duración: 102 minutos

Estreno: 13 de septiembre de 2019

★ ★ ★ ★ ☆

Sinopsis: Un viaje a través del arte, la industria, tradiciones, simbolismos y festejos que existen alrededor de los fuegos artificiales a través de cinco países: México, España, Japón, Brasil y Francia.

 

Llamar a Poetas del cielo un documental sobre la pirotecnia es, paradójicamente, tan adecuado como limitante. A eso se reducía mi conocimiento de este largometraje antes de sentarme a verlo, y sin duda fue para bien. Sí es un documental sobre la pirotecnia, y si llegas al cine sólo con esa idea, te resultará sorprendente y grato lo vasta que puede resultar la palabra, si se le enmarca en los contextos de diferentes naciones.

Al hablar de los fuegos artificiales, es fácil quedarnos con el efímero espectáculo de luces en el cielo que, para el caso mexicano, nos toca cada septiembre y diciembre. El director Emilio Maillé, no obstante, construye un relato en el que México comparte el lenguaje del fuego con Brasil o Japón. Por ejemplo, están quienes en Río de Janeiro operan el despliegue pirotécnico de cada Año Nuevo, héroes tan anónimos como los apasionados artesanos detrás de la mascletá valenciana y los castillos en las fiestas patronales en Tultepec.

Para los no iniciados en el tema, Poetas del cielo esconde riquísimos descubrimientos que bien funcionarían como un curso intensivo sobre la pirotecnia impartido de propia voz por sus protagonistas de múltiples nacionalidades. Es un documental que contiene testimonios sobre la historia de los fuegos artificiales, el arte de fabricar sus infinitas presentaciones (que van de los típicos cohetes a tubos de bambú), advertencias sobre sus peligros – hay mención de los trágicos accidentes que hemos atestiguado en Tultepec – y reflexiones sobre el simbolismo del fuego en la historia de las sociedades, la guerra y el universo mismo.

No obstante, su gran virtud es, por diseño, su gran falla: hay tanto terreno que cubrir, que siempre nos quedamos con un sentimiento de frustración, pues antes de poder saber más sobre lo que acabamos de ver, el director no tarda en pasar al siguiente evento o testimonio. Rara vez nos detenemos a profundizar más allá de los comentarios y las imágenes. Pero esto último no es queja.

El filme de Maillé alcanza su punto álgido, el de una poética contemplación visual, cuando logra hacernos sentir como espectadores en plena oscuridad de la intemperie, testigos de primera mano de las pinceladas de fuego que en el lienzo del cielo. Con la luz de los tezutsu hanabi japoneses, la danza luminosa de la Torre Eiffel, y la sinfonía de explosiones en Valencia, el cinefotógrafo Carlos de Miguel pinta imágenes que encapsulan el sentir del documental: que los fuegos artificiales no son nada menos que una forma de arte.

Veredicto

Aunque por momentos es somero en su abordaje tan amplio del tema, Poetas del cielo es un gran primer paso hacia el maravilloso y diverso mundo de los fuegos artificiales que, tal como estos, se quedará contigo incluso después de que la luz se extinga y dé paso a la oscuridad en la sala.

Por Lalo Ortega

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