No manches Frida 2, buscando la comedia en el estereotipo

La comedia mexicana No manches Frida 2 repite muchos de sus elementos y de su reparto buscando repetir también el éxito de taquilla.

 

Director: Nacho G. Velilla

Actúan: Omar Chaparro, Martha Higareda, Regina Pavón

Duración: 103 minutos

★ ☆ ☆ ☆ ☆

 

Sinopsis

Zequi (Omar Chaparro) y Lucy (Martha Higareda) están a punto de casarse y decimos a punto, ya que Zequi después de su despedida de soltero llega en tan mal estado a la boda, que en lugar de dar el sí termina vomitando, razón por la que Lucy decide terminar con él. Esto sucede al mismo tiempo en que el Instituto Frida Kahlo es invitado a unos juegos interescolares en la playa. Zequi piensa que este viaje es el pretexto perfecto para reconquistar a su amada, pero no cuenta con que Lucy se reencontrará con un viejo amor, quien dicho sea de paso, ha perdido algunos kilos y se ha convertido en un gran galán. Ahora Zequi no solamente tendrá que ganar la competencia de baile interescolar, sino que también de nuevo el corazón de Lucy.

Después del éxito taquillero que representó No manches Friday como marca la franquicia alemana de la que se inspira, el director Nacho G. Velilla se aventura a continuar con las experiencias de los integrantes del instituto Frida Kahlo, repitiendo a la mayoría del elenco, entre ellos los protagonistas, como era de esperarse: Lucy (Martha Higareda) y Zequi (Omar Chaparro).

Desde el inicio de la historia de No manches Frida 2 nos encontramos con una comedia que nos lleva a querer reírnos de los pastelazos —o más bien las vomitadasque sus personajes se avientan en medio de actuaciones nada favorables y construidos sobre lugares comunes: el hombre rudo, la bailarina exótica voluptuosa, la señora madura en busca de hombres y bebedora, y los estudiantes rebeldes y burlones que también están ávidos de experimentar con el sexo y el alcohol.

Todo esto surge a partir de que Zequi y Lucy están por casarse, pero antes de llegar al altar les surgen dudas y conflictos. Asimismo, la escuela se encuentra en crisis por lo que buscan competir con otros centros educativos para mantener su estatus. Y claro que la competencia tiene lugar, casual, en un hotel paradisiaco de las playas mexicanas.

Las peleas y groserías son plato fuerte de esta producción que más bien parece un infomercial de turismo, pues la mayoría de la narración se lleva a cabo en un gran resort de las costas mexicanas en la que los estudiantes, inverosímilmente, pasan días ensayando sus rutinas en compañía de colegas de otros institutos.

No es que todo esté mal, la dinámica entre los alumnos y profesofrece un mensaje de amistad y de valor por las personas. El problema es que, a pesar de que se trata de una cinta meramente para entretener al público joven, en calidad es bastante grotesca y con pocos momentos que provocan una risa honesta, más allá de los chistes baratos en los que las redes sociales, los estereotipos y lo sexual o burdo intervienen.

Veredicto

Puede ser que a muchos jóvenes les convenza llenar las salas de cine para ir a divertirse con esta propuesta, pero definitivamente el cine mexicano tiene mucha mayor calidad en otros filmes que van más acorde con la realidad que vivimos, la cual puede ser abordada con inteligencia y con mucho humor.

Por Ana Lucía Altamirano

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