‘Leto’, un Verano de Amor y Rock… y buen cine

Se estrena Leto, un filme de rock que no te puedes perder si eres amante del género de cine que da cuenta de los fenómenos musicales.

 

Director: Kirill Serebrennikov

Actrúan: Teo Yoo, Irina Starshenbaum, Roman Bilyk

Duración: 128 minutos

★ ★ ★ ★ ★

 

Sinopsis

El rock como movimiento institucionalizado en la Rusia de los 80 es el marco de una historia de amor y música entre unos esposos y un músico recién llegado a la escena rusa.

En el verano de 1980 en Rusia, los incipientes rockeros que querían tocar en el Club de moda tenían que someter a revisión hasta las letras de sus canciones. Se trata de una historia verdadera, en la que los personajes representan a aquellos que abrieron brecha para el género en aquél país antes de que el sistema colapsara, la década siguiente.

Mayk Vassilievitch (Roman Bilyk) lidera el grupo favorito de la época y vive para la música; sus referentes son todo lo que puede llegar a la Unión Soviética, Lou Reed y su Velvet Underground, David Bowie, Led Zeppelin, The Doors, T-Rex y Blondie, entre muchos otros. Mayk está casado con la bella Natalia y tienen un bebé, es ultra melómano y tiene una colección de discos envidiable, además de que es tan estudioso que traduce canciones y álbumes completos de sus artistas favoritos.

Por su parte, Viktor Tsoy (Teo Yoo) está empezando a componer canciones con su banda en formación y Mayk le tiene muchísima fe, por lo que le aconseja cómo debe construir sus melodías y lo toma bajo su ala para enseñarle de su arte y ponerlo a su nivel musicalmente, preparándolo para ser aceptado en el quisquilloso grupo.

Entre Viktor y Natalia (Irina Starshenbaum) surge una amistad de esas incómodas por cercanas y ridículas. La joven le pide a Mayk permiso para besar a su nuevo amigo, mientras la nueva banda obtiene la oportunidad para tocar en vivo.

La anécdota es atractiva per se y los diálogos acentúan la lírica del rock que es la base argumental de esta obra de arte. El blanco y negro sí representa la nostalgia. Y como cualquier rola, tiene sus destellos que te venden el mundo espiritual que aflora en acordes y en sensaciones musicalizadas, las cuales hacen de cada canción un nuevo lenguaje con palabras innovadoras para designar las cosas y expresar los sentimientos.

Unidos, el lenguaje visual y el musical, cuentan una historia que deja de ser real en gloriosos momentos en los que se vuelve coral y escuchamos cantar a los pasajeros de un tren, de un tranvía y a personajes nuevos en la calle bajo la lluvia. Por si las canciones clásicas inmaculadas en Leto no te mueven lo suficiente, además hay detalles de animación en cada uno de estos clips que te volverán loco.

Veredicto

Si te gustó Trainspotting, Lisbon Story, Across the Universe o Almost Famous, amarás Leto. Querrás el soundtrack: la música rusa es excepcional y además sus versiones de los clásicos, en crudo acento rudo con participantes que tampoco saben cantar, son excepcionales.

Por César Hernández

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