‘Mamá y papá’: corre a verla, incluso en contra de la voluntad de tus papás

Estreno: 11 de mayo

Directora: Brian Taylor

Elenco: Nicolas Cage, Selma Blair, Anne Winters y Zackary Arthur 

⭐⭐⭐

Sinopsis:

En un día de escuela como cualquiera, Carly (Winters) tiene que huir de clases para salvar a su hermano menor y a ella misma de la inexplicable ola de histeria que provoca que los padres ataquen a sus propios hijos.

Te parecerán zombis pero no lo son. Estos agresores tienen muy bien ubicadas a sus víctimas y con el paso del tiempo han acumulado suficiente ira como para abalanzarse sobre ellos. Tampoco tienen apetito feroz, de hecho son capaces de no alimentarse con tal de ver sangre en sus manos. Esperamos te hayas portado bien porque, sin razón aparente, los papás son presa de una violenta ansiedad que los hace atacar a sus propios hijos hasta dejarlos sin vida.

Ese es el detonante del caos que verás en el debut como director de Brian Taylor y la razón por la que reconocerás a Nicolas Cage, por primera vez, en una gama distinta de gesticulaciones a las que nos acostumbró con sus anteriores trabajos. Cage es la cabeza de una familia estadounidense de clase media que aspira a tener más; el hombre trabaja duro y procura darse tiempo para sus hijos, pero cuando es presa de la plaga de ira parental, pierde la cordura y puede convertirse en una especie de Jack Torrance (The Shining) dispuesto a tirar puertas —con herramientas más modernas, claro está— para destruir a su descendencia.

El interprete no está solo en ese debraye. La actriz Selma Blair le hace segunda como la madre que logra contener, más que el promedio de los otros progenitores, el impulso de asesinar a sus angelitos, pero cuando al fin tiene el mismo deseo saca fuego hasta por los ojos. La pareja unida por el mismo objetivo es locura absoluta, te dará pavor pensar que podrías estar en los zapatos de la Carly de Anne Winters y el Josh de Zackary Arthur, no sin antes provocarte más de una carcajada lo irónico y absurdo del relato.

Pero no son las actuaciones el único elemento que te hará sentir pavor y risa cuando veas este filme. Las trampas que te juega la mezcla y edición de sonido te pondrá los pelos de punta, su objetivo es hacer de lo cotidiano algo escalofriante y en algunos casos de alertarte del peligro que corren los escuincles de la pantalla —espera a escuchar los gritos de un Cage desquiciado—. Los juegos de cámara contribuyen a causar más tensión y potenciar el peligro, sobre todo aquellas tomas en contrapicado que enmarcan los rostros enfurecidos de Cage y Blair.

 

Entre la velocidad y ferocidad de las víctimas y cazadores, Taylor tropieza al insertar flashbacks con innecesarios relatos con el inocente y obvio objetivo de dar contexto a situaciones del presente pero que no son trascendentes. Lo único que provocan los saltos temporales es el rompimiento del ágil ritmo que Taylor mantiene en el resto del filme.

Fuera de eso, hay poco que reprochar a este irreverente largometraje que entre sus secuencias de gore para principiantes —apenas unas cuantas escenas de violencia explícita pero con una digna cantidad de sangre— se da oportunidad de satirizar acerca de las apariencias, la vida en los suburbios estadounidenses y la dependencia de la tecnología.

Veredicto:

Corre a verla, incluso en contra de la voluntad de tus papás, es más llévalos a ellos también para que hagan catarsis. La disfrutarás por su acción y la importancia que adquieren los detalles y diálogos iniciales. Sólo omítela si no eres fan de la violencia o quieres ahorrarte ver en pantalla a papás cazando a sus hijos.

Por: Anaid Ramírez.