‘Rostros y lugares’: un filme entrañable, divertido y emotivo

Estreno: 13 de abril.

Director: Agnès Varda y JR

⭐⭐⭐⭐

SINOPSIS:

La cineasta Agnès Varda une su talento con el artista urbano y fotógrafo JR para realizar un viaje a través de la vida rural de Francia y sus personajes.

A los 88 años, la realizadora belga Agnès Varda (Le Bonheur, 1965) nos comparte de la mano del artista y fotógrafo JR —responsable de esas fotografías de gran formato, como la del bebé que se asoma entre la frontera entre EU y México—, reflexiones, pensamientos y curiosidades cuando se dan a la tarea de recorrer Francia y hacer lo que más les gusta a ambos: conocer nuevos rostros y conocer nuevos lugares. Escuchar sus historias, sus filosofías de vida, sus ideas, tomarles fotografías y compartirlas en lugares públicos.

El punto de partida de la película Rostros y lugares es sencilla e incómodamente directa: JR quiere reunir junto a Agnès, quien lleva poco más de seis décadas de trayectoria como cineasta, tantas imágenes como les sea posible antes de que ella las pueda olvidar o antes de que ella muera.

La idea romántica antes descrita no le hace justicia a la hermosa película que este curioso par de creadores nos entrega. Cada experiencia, lugar o encuentro esconde innumerables reflexiones y emociones: hacia la vida rural en Francia, las costumbres y tradiciones, el amor por una profesión o por un paraje, a los cambios de los tiempos, a la historia, al cine, a la amistad, al arte, a la edad, las mujeres, al trabajo, al orgullo o satisfacción por lo que hacemos, y por muchas cosas más.

Nominada a los premios de la Academia en la categoría de Mejor documental, Rostros y Lugares es una película emotiva y entrañable, que entre otras muchas cosas se debe festejar porque nos da el pretexto para otorgarle el reconocimiento que el cine le debe a una figura clave de su historia: Agnès Varda. Esta octogenaria directora fue parte clave de uno de los movimientos mas importantes de la historia del cine, la Nueva Ola Francesa.

Uno de los atractivos de este documental es la forma en que nos lleva de paseo, literalmente, sin ambición o pretensión, pero con enorme profundidad y claridad a reflexiones que pasan por la sociología, la psicología o la antropología social través de charlas naturales y fluidas.

Rostros y lugares se trata también de una oportunidad para ver a la curiosidad y la casualidad como los ingredientes básicos de una aventura que muestra el proceso creativo de estos artistas.

Pero son las conversaciones y reflexiones de todo tipo las que se roban la película y permiten, como pocas veces, salir del cine con un genuino sentimiento de empatía, alegría por la vida y hasta optimismo.

VEREDICTO:

Rostros y lugares es de esas piezas que no debes dejar pasar, se trata de un filme entrañable, divertido y emotivo, que invita a la reflexión gracias a que fue realizado con inteligencia, además de que resulta sorpresivo. Una de las mejores experiencias cinematográficas que tendrás este año.

Por: Arturo Aguilar.