‘La Momia’: Una mala carta de presentación para una gran franquicia











Era lógico que la apertura para el oscuro y ambicioso universo de Universal (una franquicia que está segura de tener su identidad bien definida), fuera con uno de sus monstruos clásicos. Tal vez alguien como el Dr. Frankenstein. Pero después de todo, el co-escritor de Star Trek / Transformers, Alex Kurtzman, quien es su primera vez dirigiendo una película con tanto presupuesto, juntó en el nuevo remake de La Momia aventuras fantásticas, horror (como lo esperábamos), guiños de Misión Imposible (tal vez de manera involuntaria pero inevitable debido a que el film está liderado por Tom Cruise y escrito por Christopher McQuarrie) y el drama proveniente de una novia psicótica (sí, nosotros tampoco estábamos esperando eso). 

Mientras que el film tiene el tono de la película original—y la mayoría de los movimientos de Cruise en aquella época— La Momia es un material que te mantendrá entretenido un par de horas sin molestar tus funciones cerebrales más desarrolladas, pero que no impactará en ti como pensaste que lo haría esta primera película del universo oscuro de Universal. 

Mientras que los elementos de horror te harán saltar de vez en cuando de tu asiento—además de una trama cursi robada de American Werewolf in London—los elementos de acción son numerosos y muy bien ejecutados, desde la secuencia de cómo se desploma el avión M:I, hasta un zombie que se sumerge en el agua para atacar las catacumbas debajo de Londres. Y también hay que resaltar que hay un leve repunte de inteligencia en un guion que utiliza la valentía de Cruise como punto central mientras está siendo perseguido por una hechicera egipcia. Incluso hay un momento en el que Tom amenaza con un “¡No en la cara!” mientras es atacado por una horda de zombies. 

Lo que no funciona muy bien es el papel de “la novia stalker”. Después de que se dio el anuncio de que el monstruo estelar sería una momia femenina—monstruo que está desempeñado con gracia por Boutella—es una pena que el personaje se reduzca a una cazadora de hombres, que por alguna extraña razón quiere a Nick como recompensa para el dios de los demonios, Set, aka el ser más despreciable ser del inframundo, mientras todo lo demás se envuelve en una nube de mitología espesa. 

Hablando de exposición, La Momia de Kurtzman está llena de eso. Se nota la desesperación de demostrar que este nuevo universo lleno de monstruos virtuales es palpable, y encarga esa pesada misión a Russell Crowe. Después de narrar un infinito prólogo, aparece como el Dr. Jekyll, ahora reinventado como el jefe de una organización secreta dedicada a luchar contra lo sobrenatural. Tiene la mano de un gill-man y el cráneo de un vampiro resguardados en su base subterránea, la cual está localizada dentro de un Museo de Historia Natural. 

El guion sugiere que el nuevo universo de Universal se conectará de una manera más inteligente que la risible forma en la que manejaron Van Helsing, pero siguen cayendo en lo soso, y la trama pomposa es pesada pero describe vagamente lo que verdaderamente deseábamos saber. Si embargo, Crowe hablando de grandes demonios y jugando con piezas de domino,  se equilibran bien con las escenas en las que el lado oscuro emerge en lo momentos más inconvenientes. 

Mientras tanto, Cruise se la pasa saltando y corriendo como suele hacerlo dentro de un personaje que tiene el territorio un poco más aplanado gracias a Ethan Hunt, el protagonista que se envuelve en la acción mientras una mujer mucho más joven que él lo persigue. Tal vez lo próximo que veamos sea a la novia de Frankenstein siguiéndolo a todos lados. 

VEREDICTO 

Aunque los efectos especiales están perfectamente bien ejecutados, la historia cuenta con estructura demasiado sosa, los personajes dejan mucho qué desear y en conjunto se siente como una muy mala carta de presentación para este nuevo universo de monstruos de Universal. 

Edgardo Reséndiz y Eduardo Molina la declararon un completo fracaso en su especial de reseñas en el periódico Reforma para «La Veo o No la veo» y en el ranking de Tomatazos alcanzó un escaso 17 %, lo que definitivamente muestra que el debut de Universal no fue para nadie lo que se esperaba.