‘Scary Stories to Tell in the Dark’: terror para chavitos
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Dirigida por André Øvredal (Troll Hunter) y producida por Guillermo del Toro (The Shape of Water), Scary Stories to Tell in the Dark adapta en una sola historia los famosos cuentos de Alvin Schwartz. Te contamos qué tal en la reseña.
Estreno en México: 16 de agosto de 2019
Director: André Øvredal
Actúan: Zoe Margaret Colletti, Michael Garza, Austin Zajur
Duración: 90 minutos
★ ★ ★ ☆ ☆
Sinopsis: Estados Unidos, 1968. En el pequeño pueblo de Mills Valley, un grupo de amigos encuentran el libro de Sarah Bellows, cuyos horripilantes cuentos se tornan demasiado reales.
Los libros de Scary Stories to Tell in the Dark, escritos por Alvin Schwartz, han sido a menudo comparados —no sin razón— a los de Goosebumps de R.L. Stine, así como a la serie de televisión Are You Afraid of the Dark?. Muy al modo de ambos casos, la de Schwartz es una antología de relatos de terror inconexos, dirigidos al público juvenil, si acaso con dos rayitas más de gore.
La versión fílmica, ingeniosamente, hace de la colección de cuentos uno de sus personajes, escrito por la trágica figura de Sarah Bellows. Un grupo de amigos púberes encuentra el libro una noche de Halloween en una mansión embrujada (obvio), y descubren a la mala que nuevos cuentos aparecen en sus páginas cada noche… con ellos mismos como protagonistas. En adelante, intentan descifrar cómo frenar la maldición del libro, antes de que éste cobre sus vidas.
El de Scary Stories es un guión sencillo, con el ocasional y obligado humor adolescente, más un toque de romance entre Stella (Zoe Margaret Colletti) y Ramón (Michael Garza). Los escritores añaden, con mediano éxito, subtexto sobre la generación de mediados del siglo XX victimizada por la política de la Guerra Fría (con todo y referencias a Night of the Living Dead y otros productos culturales del momento).
La manufactura de Øvredal es efectiva para crear escalofriantes atmósferas, aunque hay que decirlo, tampoco nos deja imágenes muy memorables. La excepción, por mucho, viene con los desfiles de monstruos: perturbadoras y convincentes —si acaso caricaturesca en un caso particular— recreaciones de las ilustraciones originales de Stephen Hammel para los libros. En definitiva se trata de material para pesadillas, al menos en lo que concierne al terror apto para un amplio público.
Veredicto
Scary Stories to Tell in the Dark difícilmente impactará al público conocedor del cine de terror. Sin embargo, su guión y diseño de personajes son suficientes para atrapar a los espectadores más jóvenes, lo cual no sorprende si se tiene presente el público al que fueron dirigidos los cuentos de Alvin Schwartz.
Por Lalo Ortega
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